Internet ya es el medio más consumido por los Europeos, por delante de la televisión, la radio y la prensa escrita y los libros. Pasamos alrededor de 12 horas semanales conectados a Internet, ya sea en el ordenador, tablet o smartphone, y en el caso de los jóvenes esa media sube substancialmente.
Es indudable que Internet ha cambiado nuestra sociedad y nuestra manera de hacer las cosas, ahora podemos tener acceso a información de cualquier cosa en cualquier momento, y no solo eso, sino que además nosotros mismos podemos crear información. Nuestra sociedad esta evolucionando hacia una mayor velocidad de las cosas. Todo sucede más rápido, todo parece que tiene que ser inmediato, y el tiempo es cada vez un bien más preciado.
Antes la gente estaba acostumbrada a formar colas que podían dar para un rato, ahora ya no, antes la gente enviaba una carta y sabia que quizá la respuesta no llegaría en semanas, ahora si no te responden un e-mail en unas pocas horas llamas al diablo por todos sus nombres, y no solo eso, la globalización como otra de las consecuencias (si es buena o mala ya es opinión de cada uno) de la era Internet ha borrado fronteras en los deseos de la gente, si hay algo en Estados Unidos, Japón o Australia que te gusta, da igual si en tu ciudad no existe o no ha llegado aún, lo quieres comprar igual, y además sin esperas y sin desplazamientos.
La solución (¿evolución?) de todo esto: el Comercio Electrónico, también llamado e-commerce. Es de los pocos sectores que a pesar de la grave crisis económica ha seguido creciendo. Y lo seguirá haciendo, aún hay muchas empresas y negocios que no aprovechan las oportunidades que les puede dar esta modalidad de venta. Según la prestigiosa consultora Forrester el comercio electrónico en Europa alcanzará los 191 millones en ventas en el 2017 frente a los 113 millones actuales.
Fruto de este crecimiento por ejemplo una veintena de empresas catalanas punteras en el comercio electrónico han creado el clúster Ecommerce&Tech para potenciar y consolidar Barcelona como referente en este sector emergente.
¿Y cuál es el porque de este éxito? Estas son algunas de sus ventajas frente al comercio tradicional que lo justifican:
- Punto de venta deslocalizado, comprador y vendedor pueden estar en lugares distintos
- Flexibilidad en los medios de pago, permite pagar de manera electrónica o tradicional
- Mayor gama de productos, se puede tener acceso a un numero infinito de productos de distinto proveedores
- Sin horarios, los clientes pueden comprar a cualquier hora
- Acceso a un mercado global, pueden comprar personas desde cualquier punto del planeta
- Reducción de costes y precio final gracias a la reducción del proceso logístico
En el camino para crear una empresa de comercio electrónico o en el evolucionar una tienda física en una de virtual no todo son facilidades, existen algunos obstáculos culturales y legales que hay que saltar.
Aunque en España el comercio electrónico ha crecido contundentemente en los últimos años, solo un 43% de los españoles compra por internet, aun existe mucho margen de crecimiento. Algunos de los factores de este porcentaje se deben a nuestra cultura mediterránea, tradicionalmente hemos hecho mucha vida en la calle y hemos sido un pueblo muy de ir a comprar al comercio de barrio. Pero esto esta cambiando a pasos agigantados en los últimos tiempos.
La otra barrera que a la que debe hacer frente una e-commerce o empresa de comercio electrónico es la LSSI-CE, que es la Ley de Servicios de la Información y Comercio Electrónico, ley de obligado cumplimiento por parte de todas las empresas que tengan página web o usen el correo electrónico con fines comerciales. Y en esto desde Grup Qualia os podemos ayudar, adaptando vuestra página web o tienda virtual a la LSSI-CE.
En resumen, si tenéis un negocio o simplemente tenéis pensando emprender y abrir una tienda, tener muy en cuenta el mundo virtual, Internet esta cambiando todo, incluso nuestra forma de comprar.